Doy gracias a Dios por haber encontrado al doctor Alberto Galán y este tipo de medicina. Ha sido para mi de gran impacto el ver como mi cuerpo se recupera, teniendo en cuenta que pasé por innumerables tratamientos sin el resultado esperado. El inicio del tratamiento fue ¿cómo decirlo?, ¿particular?, ¿especial? No estaba acostumbrada, primero, al agradable trato, ni a la manera del procedimiento ya que los medicamentos que él receta son muy personales, hechos con base en lo que uno es, todo gira en torno del paciente. Me resultaba interesante, y a la vez extraño, que unas gotas con nombres difíciles de recordar fueran tan benéficas. Transcurrido el tiempo noté la mejoría y me di cuenta que este procedimiento no me afectaba ni alteraba otras partes de mi cuerpo.

Siempre estaba atenta a los efectos secundarios de los medicamentos, pero ahora ya no es así. Por otro lado, mi recuperación no ha sido la única exitosa, soy madre y esposa y ver cómo evoluciona la salud de mi familia gracias a este tratamiento, sin importar la enfermedad es una gran alegría. Realmente le agradezco a Dios por ese don que le otorgó al doctor Galán, él es un médico que se preocupa y anhela la recuperación de su paciente, es sabio en su profesión. Personalmente me siento más que dichosa con los resultados, me siento sana. En nombre mío y de mi familia, gracias Doctor.

Veinte años atrás presenté un dolor en la cabeza y el rostro de forma casi permanente, así que por mi EPS asistí a un médico general y especialistas internistas, neurólogos otorrinos, entre otros.
 

Durante este tiempo me apliqué Diclofenaco y por cuatro años Dexametasona. Hace dos años el neurólogo por medio de una resonancia concluyó que el dolor era consecuencia del nervio trigémino. Debido a esto, me recetó una serie de medicamentos los cuales no tuvieron efecto ni mejoraron mi estado de salud. Adicionalmente, la Dexametasona no volvió actuar, por lo contrario, empeoré y me empezó un tic en el ojo derecho y los dolores se incrementaron.

Una amiga me comentó que su mamá sufría de dolores fuertes de cabeza y asistió a consulta con el doctor Alberto Galán con quien inició tratamiento y obtuvo notable mejoría, por lo tanto, decidí contactarme con él para comenzar el mío lo antes posible. Actualmente, sigo siendo tratada por el doctor Galán con Medicina Biológica por otros motivos. En general, me encuentro muy bien, el tic se presenta con poca frecuencia y el dolor disminuyó considerablemente, ya con poca intensidad y aproximandamente una vez por mes. Ahora puedo controlar el dolor con medicamentos más sencillos como Dólex y Apronax.

Hace más de tres años acudí al doctor Alberto Galán por una bursitis en el hombro, la cual fue tratada por medio de medicamentos homeopáticos durante varias sesiones, dando unos resultados favorables en corto tiempo. Desde ese entonces, tomé la decisión de llevar a mi hija Lina María de 16 años, quien venía sufriendo desde hace mucho tiempo de sinusitis, rinitis, gastritis y del colón. Además presentaba dolores menstruales muy fuertes y un alto nivel de estrés. Ella comenzó el tratamiento con sesiones frecuentes de acupuntura y medicamentos homeopáticos, obteniendo buenos y definitivos resultados en un período de seis meses.

Así mismo, mi mamá, mi hermano y mi suegro se han sometido a tratamiento con el doctor Galán alcanzando efectos rápidos y éxitosos. Estamos muy agradecidos de habernos puesto en sus manos y gozar de buena salud. Él es una persona muy profesional en su labor y muy carismático. Mil gracias.